Así lo expresó el Dr. Néstor Carrillo* en el Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (IAL/UNL/Conicet), de Santa Fe, donde tiempo atrás dictó un seminario. Entre otros temas, se refirió a la controversia sobre transgénicos.
“Este tema sobre el cual expuse describe la identificación y el uso de una proteína que se encuentra en microorganismos como un elemento para aumentar la tolerancia de las plantas a situaciones ambientales adversas -altas temperaturas, heladas, sequía, exceso de luz, entre otras-, respuestas que son de naturaleza bioquímica. Tales microorganismos, de donde identificamos elementos que tenían que ver con la tolerancia a estrés, son los antepasados evolutivos de las plantas actuales. Es decir, las plantas derivan de estos microorganismos, pero algunos genes que ayudaron a estos microorganismos a sobrevivir en condiciones ambientales adversas, se perdieron a lo largo del camino evolutivo”, contó.
¿Hubo una pregunta básica?
Sí, buscamos identificar esta proteína que funciona en el microorganismo y la reintrodujimos en la planta para ver qué ocurría. Tuvimos suerte y estas plantas mostraron tolerancia aumentada a un cierto número de situaciones ambientales adversas que tienen valor agronómico. Por ejemplo: deficiencia de agua, heladas, altas temperaturas combinadas con sequía, y más. En términos generales, estas plantas funcionan mejor.
¿Qué significa esto?
Que están más saludables, las hojas son más saludables y fijan mejor el carbono y esto se traduce en los productos que finalmente consumimos: semillas, frutos, tubérculos, etc. Y desde el punto de vista científico pudimos probar una idea que nos permitió proyectarnos hacia el sector productivo, patentar y en última instancia licenciar este descubrimiento a empresas de alta tecnología.
¿De qué cultivos estamos hablando?
En nuestro caso, los sistemas modelo de plantas son mostaza y tabaco. La mostaza tiene poco valor comercial y el tabaco mucho más, pero muy mala prensa. Después, a través de los contactos que establecimos y de las patentes que se hicieron, se transformaron muchos otros cultivos; algunos funcionaron mejor y otros peor. Los que han tenido más éxito son arroz, remolacha y caña. Hoy, estamos trabajando con papa, que es algo muy prometedor pero está en un estadío posterior, y con colza. Pero a esta altura hay muchos cultivos transformados por otros grupos y personas, incluyendo soja, maíz, alfalfa. Nuestro grupo solo ha transformado tabaco y tenemos para trabajar cebada y papa, que nos han facilitado otros laboratorios.
Transgénicos
“Creo que nos debemos un debate crítico porque considero que hay una parte de razón en todos los actores. A mí me parece que en un país como el nuestro, donde los recursos naturales son tan importantes y una fuente potencial de nuestro desarrollo, cerrarnos a un desarrollo biotecnológico porque tiene riesgos no es una buena política. Todo desarrollo tecnológico tiene sus riesgos. Y no es la alternativa volver a los árboles y a la Edad del Bronce, por un lado, o venderse a Monsanto, por el otro”.
(*) Investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet)en el Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario -Conicet/UNR- y docente en la UNR. Por el Lic. Enrique A. Rabe (ÁCS/Conicet Santa Fe).